Entre los desafíos asociados a este proceso
se pueden encontrar:
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Las personas involucradas no tienen
las capacidades necesarias para crear un modelo de concepto.
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Lograr crear un modelo conceptual
adecuado a las necesidades operativas de forma efectiva y eficaz. Para ello hay que generar una diversidad de
ideas, se requiere de un máximo de creatividad.
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Modelar una solución en vez de
modelar el problema. Muchos modelos solo sistematizan los problemas en vez de mejorar.
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No se cuenta con la tecnología necesaria para soportar los requisitos del
negocio y brindar una solución de manera efectiva y eficiente.
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Trabajar de forma armoniosa y conjunta con el equipo de
trabajo.
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Capturar la atención e interés de los participantes.
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